¡¡Hola a todos!!
Antes de nada me voy presentar, por si no me conocéis y os preguntáis quién soy y qué hago aquí. Me llamo Pilar y no soy ninguna experta en rol, simplemente me encanta jugar, y aunque tuve unos cuantos años de sequía rolera, ahora que tengo algo más de tiempo vuelvo a intentar jugar todo lo que puedo. Además tengo tres hijos, dos niños de 12 y 10 años y una niña de 9, así que estos chicos tan majos de La Tapadera me han hecho un huequito aquí para contaros mi experiencia intentando inculcarles a mis hijos (y todo amigo suyo que se preste) la afición por el rol.
No voy a hablar de los beneficios educativos del rol, porque yo no soy docente ni nada parecido, y si alguien tiene dudas sobre todo lo que el rol puede aportar a niños y mayores, en este blog puede encontrar un montón de información sobre el tema escrita por gente cualificada para ello: profes de los que todos querríamos para nuestros hijos. ¡Una lectura muy interesante! Voy a hablar únicamente de mi experiencia y mi visión personal, sin ninguna pretensión.
Yo, como madre que echaba de menos el rol pero que no tenía dudas sobre lo maravilloso que es, por experiencia propia, en cuanto mis niños crecieron un poco me hice con un ejemplar de Pequeños Detectives de Monstruos, que por aquel entonces acababa de salir. La verdad es que es un juego genial. Puedes jugar en plan gincana por la casa y mezclarlo con manualidades cuando son pequeños o también puedes mantenerlos sentados un buen rato investigando todos los rincones de una casa que has dibujado, recopilando pistas entre susto y susto y consultando el libro para dar con el monstruo. Puedes currártelo todo lo que quieras, pero si no tienes casi nada de tiempo, cosa que pasa a menudo con tres canijos en casa, en diez minutitos preparas una aventura para entretenerlos (y entretenerte, claro) un buen rato.
Cuando los niños fueron creciendo me apetecía buscar algo más parecido a lo que yo recordaba del rol. Me apetecía que tuvieran un personaje que interpretar, con su personalidad y sus habilidades… que tuvieran que preguntarse qué haría alguien así en determinada situación. Y entonces jugamos algunas partidas a Magissa. Les gustaba mucho pero jugamos poco, porque en aquel momento, a mí, que nunca había dirigido rol, el manual, con todas las posibilidades diferentes que ofrece según edades y experiencia, se me hizo algo lioso y lo dejé un poco apartado. Ahora estoy deseando releerlo y darle otra oportunidad, porque el libro me parece precioso, y creo que a mi hija y sus amigas les va a encantar.
Un poco más adelante jugamos también a Ryuutama, que me encanta por la estética que tiene y por lo buenrollista que es todo (eso del honobono, jeje); además, la mecánica es fácil y siempre nos lo hemos pasado fenomenal jugando. ¡¡Os lo recomiendo!!
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El sistema de combates de Ryuutama me parece súper divertido |
Después de todo esto, me encontré sin embargo en un momento algo complicado para nuestras aventuras roleras. Mi hijo mayor consideraba que esos juegos eran "de pequeños", y no quería jugar (cositas de la preadolescencia). El mediano, cómo no, aunque en realidad disfrutaba, muchas veces acababa diciendo que su hermano tenía razón, que eran juegos "de pequeños". Y yo me encontraba buscando nuevas posibilidades.
Así llegó el verano, fuimos a TdN y tuve la suerte de jugar una partida con Antonio (por cierto, ambas experiencias súper recomendables, ir a TdN y jugar con Antonio), y en algún momento hablamos sobre este blog y sobre Hitoskids. ¡¡Ole ole, qué descubrimiento!! Preparando los días de calor en el pueblo, decidí llevarme algo de rol y descargué Hitoskids, el resumen y un par de aventuras. Todo gratis porque, como decía, estos chicos de La Tapadera son muy majos. El éxito fue rotundo. El primer día jugamos solo mis hijos y yo “El bastón del mencey”, y les gustó muchísimo, yo creo que fue de las veces que mejor nos lo hemos pasado los cuatro con el rol. Tanto es así, que al día siguiente preguntaron si podían invitar a algunos amigos... y debieron venderlo bien porque me junté con 11 niños de entre 8 y 13 años. Pasado mi susto inicial (y compartiendo personajes) ¡¡¡nos lo pasamos de miedo con “Escuela de mascotas”. Les encantó la aventura y todos se quedaron con ganas de más.
Por si fuese poco, al día siguiente pasó otra cosa que me hizo muchísima ilusión. Como les dije que no tenía más aventuras preparadas de momento, y como estaban ansiosos de rol, mis tres hijos decidieron ellos solitos preparar una partida de Pequeños Detectives de Monstruos para los hijos pequeños de mis amigas. Se pasaron la tarde entera planificando las pistas y dibujando el plano de la casa. Miguel y Luis se rieron muchísimo planeando y escribiendo cada detalle y Amaia dibujó huellas, preparó carnets de Detective y fabricó un pequeño gamusino monísimo. Yo disfruté enormemente esos momentos, haciendo que leía otra cosa y mirando de reojo a los tres colaborando tan coordinados y divertidos. La partida salió genial, los pequeños lo pasaron en grande, mis hijos disfrutaron de su primera experiencia dirigiendo rol y mis amigas, que nunca han jugado a rol, alucinaron con todo. ¡¡Fantástico!!
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Niños dirigiendo rol para otros niños: ¡¡me encanta!! |
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Cuidado con la hoja de personaje de Amaia para El sepulcro olvidado de
Radeok; está llena de spoilers en forma de dibujitos, jejeje |
Creo que se ha notado, pero me encanta Hitoskids. Si alguien quiere probar a jugar a rol con sus hijos no puede ser más fácil. Leyendo un PDF de tres páginas puedes ponerte a jugar enseguida y pasarlo en grande. En cuanto a las aventuras que hay aquí publicadas, vienen perfectamente explicadas, con un montón de recursos y me parece que están muy bien pensadas. En las dos que he mencionado, los personajes van al cole o al instituto y tienen unos 12 años por lo que para los niños es muy fácil interpretarlos, y es muy divertido verles meterse en la piel del gracioso de la clase, de la chica deportista, del friki de los videojuegos… Además tienen un poco de todo, diferentes posibilidades, acertijos y claro, unos cuantos mamporros. Al menos a mis hijos y sus amigos les encanta el "momento combate" en las aventuras de rol, pero lógicamente está genial que haya un poco de todo, y el equilibrio en estas aventuras está muy logrado.
También hemos jugado El sepulcro olvidado de Radeok, que es más de fantasía y que también ha triunfado con mis hijos. Todo esto nos ha reencontrado con el rol. ¡¡Bien!! Mi hijo mayor quiere el juego de Hora de Aventuras y yo tengo ganas de probar con ellos otros juegos que he conocido recientemente, como Tales from de Loop o Máscaras del Imperio, aunque por supuesto soy todo oídos si tenéis sugerencias.
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Yo tan contenta con mi resumen de Hitoskids |
Resumiendo: que si no habéis jugado a rol con vuestro hijos, ¡¡jugad insensatos!! No hay excusas para no probarlo porque tenéis muchos medios a vuestro alcance, y si lo hacéis, creo sinceramente que no os vais a arrepentir. ¡¡Es una experiencia magnífica!! Yo ahora que soy madre, como suele pasar, me acuerdo de la mía, que cuando mis cinco hermanos y yo jugábamos a D&D en aquellos tiempos en que algunos pensaban que el rol era de locos con katana, siempre decía: “¡¡El rol es lo mejor que se ha inventado!! Mis seis hijos horas y horas en una habitación, sin enfadarse, riéndose y olvidándose casi hasta de comer: lo mejor que se ha inventado!!” ¡¡Qué razón tienen las madres!!!
Espero no haberos aburrido mucho. ¡¡Saluditos!!