jueves, 22 de agosto de 2019

PARANOIA: así suena el Complejo Alfa (por Daniel Cervantes)


PARANOIA: así suena el Complejo Alfa

La importancia de utilizar música durante las partidas es algo que, aunque se puede discutir hasta el fin de los tiempos, va a depender siempre de si se ha llevado a cabo una correcta investigación a la hora de dar con el hilo musical adecuado para el juego en cuestión, estudiando muy bien el tono de la partida antes de utilizar cualquier musiquilla genérica sacada de YouTube. Vamos, que pa' poner cualquier cosa, no pongas na'.

Aún está presente en mis peores pesadillas una partida de D&D 3.5 con la banda sonora de Titanic reproducida a través del altavoz de un Alcatel. Terror.



Paranoia puede ser, en mi opinión, el juego en el que más justificado está el uso de música ambiente. Para explicarlo voy a ponerme un poco tontorrón y voy a recurrir a dos conceptos cinematográficos: la música diegética y la música extradiegética. Veamos un par de ejemplos:



Jack Sparrow no está escuchando la ya archiconocida -y sobreutilizada- melodía de Hans Zimmer mientras su barco se hunde sin remedio. Esta es una música destinada exclusivamente al espectador, sin ninguna justificación dentro de la ficción, es por esto que hablamos de música extradiegética.



En este otro caso, la canción que escuchamos no es ajena a la propia ficción, sino que está justificada a través del iPod que utiliza el protagonista de Baby Driver, que se pone el tema para dar el golpe (Neat Neat Neat de The Damned). Hablamos entonces de música diegética.

La primera edición de Paranoia data de 1984, fecha que da título a la famosa novela de Orwell, uno de las principales fuentes de inspiración para el juego dada la hipercontrolada y altamente jerarquizada sociedad de ambas obras. Además, Paranoia incorpora conceptos como la ingeniería genética y control de masas mediante drogas de Un Mundo Feliz de Aldous Huxley, o la idea de una descontrolada y diabólica inteligencia artificial que se vio por primera vez en relatos como No tengo boca y debo gritar de Harlan Ellison. Todo esto, sumado a una conciencia crítica con la cada vez más consumista sociedad norteamericana de la época fueron el caldo de cultivo perfecto para crear el distópico mundo de Paranoia.

Si no has oído hablar de Paranoia jamás pero lo que lees te está gustando, échale un ojillo rápido a esta guía que utilizo para que los nuevos jugadores entren en calor sin tener que leerse el manual.

¿Y qué tiene que ver todo este rollazo de la música diegética y la distopía retrofuturista con Paranoia? Pues bien, el perfecto mundo del Complejo Alfa, último bastión de la humanidad (o eso nos quiere hacer creer el todopoderoso Ordenador) es un refugio hipercontrolado que conserva de manera retorcida los valores capitalistas de la sociedad norteamericana del momento (y de ahora, qué demonios), convirtiendo el “sueño americano” en una perturbadora obligación bajo la estricta vigilancia del Ordenador. Esto nos viene de perlas, pues estos valores casi que tienen su propia melodía, la de supermercados, aparcamientos, recepciones de hotel y ascensores de la época.



Es por esto que es fácil imaginarse estas melodías de bossa nova y soft jazz reverberando en los interminables pasillos del Complejo Alfa mientras el todopoderoso Ordenador permanece vigilante, clavando su distorsionado ojo en nuestra nuca.

¡Buen ciclodía, ciudadano! Recuerda: los secretos son traición.

Esto convierte la música en una poderosa arma para el director de Paranoia, siendo un recurso que introducirá aún más al jugador en el distópico Complejo Alfa, actuando como la música diegética perfecta para que los jugadores escuchen lo que realmente escucharían sus personajes vagando por el imprevisible mundo de Paranoia, completando la partida con un plus de inmersión.

¿Visita al laboratorio del SID mientras BACTE-R-IOH-2 presenta el nuevo equipo
experimental recien sacado de fábrica?



¿Monótona sala de espera en el sector K23 rellenando el interminable papeleo de un formulario A96?



¿Paseo por el sector residencial 238-A, donde según las últimas informaciones, se sospecha de traidora actividad comunista?



El límite del absurdo lo pones tú, pero la idea es utilizar el precioso contraste que se genera entre esta ligera y optimista música (la de Muzak, en concreto, diseñada específicamente para incentivar el consumo), y la aparentemente feliz pero completamente represiva y peligrosa vida bajo el yugo del Ordenador en el Complejo Alfa.

Por supuesto no toda la música que utilices en tu partida de Paranoia
tiene que ser diegética o ir por este rollo: marchas militares soviéticas, por ejemplo, le pueden dar una nueva y divertida dimensión a un encuentro (o directamente combate) entre los Esclarecedores y un grupo de traidores comunistas.



Paranoia es uno de los juegos más cachondos que he tenido el placer de dirigir, y al mismo tiempo de los que más ricamente definido tienen su universo. Es por esto que dar con los recursos adecuados para meter a tus jugadores en la piel de sus personajes puede ser el detalle final a la hora de recrear su distópico mundo.

Aquí podéis encontrar una lista de Spotify, que con más de dos horas (y subiendo) de música variada que he ido recopilando durante estos años, quizás os sirva de ayuda a la hora de ponerle hilo musical a vuestras partidillas de Paranoia.

Como siempre, hay tantas formas de dirigir como directores, y lo que a mí y mis jugadores nos funciona puede que no te funcione a ti. Sea como sea, si como yo eres de los que disfruta utilizando música en sus partidas, te recomiendo siempre que inviertas un buen rato en buscar la más adecuada para la historia en cuestión, transcurra en el Complejo Alfa, en el continente de Faerün o en el mar del Caribe.

No hacerlo es, por supuesto, traición.

Daniel Cervantes


A continuación tenéis una pequeña presentación para que conozcáis algo más de Daniel Cervantes, con cuya inestimable colaboración esperamos contar en próximas ocasiones ;)


Daniel Cervantes. (Cádiz, 1993)
  • Realizador audiovisual.
  • Creador de la firma audiovisual Homeless, con más de 60 producciones entre cortometrajes, videoclips, animaciones, piezas experimentales y vídeos para internet.
  • Organizador y responsable de comunicación desde 2014 del Festival Internacional de Cortometrajes Shorty Week.
  • Actualmente dirijo y produzco el largometraje documental "Paco Loco: viva el noise".

Estoy enamorado de los juegos de rol desde mi primera experiencia como jugador, a los 14 años, con un elfo pícaro en D&D 3.5 (no lo olvidaré jamás <3). Fui a esta primera partida sin tener ni idea de qué me iba a encontrar, y quedé cautivado por la experiencia. Sigo jugando (ahora a Pathfinder) con el mismo máster y en el mismo universo, así que imagínate...

Desde entonces he escrito y dirigido campañas y módulos de autor muy narrativos y sin reglas definidas o con reglas sencillas de diseño propio, juegos experimentales, partidas completamente improvisadas y módulos dentro de sistemas y universos preexistentes como Hitos (que por cierto me lo descubrió Antonio Lozano con su adaptación del videojuego "The Dig") y mi AMADO Paranoia.

Entre mi ¿juegografia? ¿rolgrafia? ¿LUDOGRAFÍA? ¿LUDOTECA? (yo que sé), me gusta destacar:

  • Una adaptación de la película 'La Cosa' de John Carpenter, con reglas sencillas de diseño propio.
  • "Ganímedes": una microcampaña espacial retrofuturista de terror fuertemente inspirada en películas como "Alien" y relatos de ciencia ficción de los maestros Asimov y Lovecraft, sin reglas definidas.
  • "Sangre Negra", un universo steampunk propio con reglas un poco más elaboradas, del que saqué un par de campañas.
  • Dos módulos de Paranoia que hacen uso del reglamento clásico ligeramente modificado.
  • "Os puedo ver", un híbrido entre rol y escape room bastante experimental.
  • Y por último: un módulo de Hitos titulado "Bella Vista 16" en el que un grupo de ladrones asalta un chalet.
Ahora mismo tengo las miras puestas en escribir mi primer módulo de La Llamada de Cthulhu y mi primera minicampaña de D&D, usando las reglas de la 5ª edición, además de seguir expandiendo mi biblioteca de módulos de Paranoia, que es un universo que -por si no os habíais dado cuenta ya- me vuelve LOCO.

Supongo que me gusta jugar y escribir rol por lo mismo por lo que me gusta ver y hacer cine: porque me encanta vivir, idear y contar historias. El rol en concreto es un formato ALUCINANTE, con posibilidades infinitas.

SI YA JUEGAS ROL, JUEGA MÁS, Y SI NUNCA HAS JUGADO, EMPIEZA YA: NUNCA ES TARDE.



8 comentarios:

  1. AMO Paranoia pero nunca lo he dirigido, y este artículo me ha animado tremendamente a hacerlo.
    ¡Mi enhorabuena al autor por el artículo, un saludo mutante!

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  2. Pues no tengo (todavía) demasiada experiencia en rol (aparte de D&D de mi juventud) y no conocía Paranoia, pero me han entrado muchas ganas de jugar!!!! Muy chulo el artículo!! 😊😊

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  3. ¡Saludos, alto Programador! Larguir-UCHO-5, alto programador del Sector CHIL-E te saluda y reconoce tus méritos en la difusión del amor y bondad del ordenador. Tus referencias a la música para partidas ha calado profundo en mi corazón, instándome a retomar viejas partidas. ¡Gracias!

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    1. Pues que sepas, Larguir-UCHO, que hoy mismo el Ordenador, en su infinita bondad, ha tenido a bien publicar una aventura completa de Paranoia, para felicidad, regocijo y sano alborozo del esclarecedor medio.
      Por cierto, que te presentas como Larguir-UCHO-5 pero tu usuario aparece como Larguir-UCHO-7... ¡ESTO HUELE A TRAICIÓN!

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    2. Oh! Traidores-comunistas-mutantes! Enlodando el el buen nombre de un alto programador. Sumarios serán realizados, investigaciones conducidas, traidores ejecutados. Gracias por tus esfuerzos, estimado ciudadano.

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