En el Club Dragom hemos terminado Días aciagos en su nueva y definitiva versión con reglamento Ysystem, y, en fin... ha sido una gozada, como siempre que dirijo este fenomenal one-shot de Eduardo Rodríguez (y ya van cinco veces). Mis jugadores me brindaron la posibilidad de desarrollar escenas muy peliculeras, o sea, muy del género (uno muy mainstream que aquí no puedo destripar), sobre todo Nely 😂, y al final la cosa quedó como muchas veces ocurre con Días aciagos: con un buen número de asuntos por cerrar ("Ahí te quedas, Emily") y pinta de primer capítulo de una larga campaña. Desde luego que Días aciagos tiene eso; suele dejar un poco la miel en los labios porque es una historia autoconclusiva que sin embargo parece el comienzo de algo mucho más grande. La verdad es que te quedas un poco con las ganas; no es la primera vez que pasa. Algún día Edu tendrá que animarse a escribir una continuación 😉
Tras Días aciagos dejo de dirigir unas semanas para pasar a ser jugador de la nueva aventura de mi amigo Javier Gil, que ha escrito una historia que tiene una pinta buenísima y se ambienta en la Rumanía de finales de la II Guerra Mundial. Tengo unas ganas locas de jugarla. Ah, y también va con Ysystem, claro que sí ☺☺☺
No os dejo fotos de la partida porque en esta ocasión no hicimos ninguna (cosas de las baterías).
¡Nos leemos!
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