Muy buenas, servidores de la muy católica y serenísima Monarquía Hispánica,
El otro día pude disfrutar de Dragones de cuera: Texas, aventura para Ysystem de Ernesto Orellana (más conocido en redes como «Emod»). La mesa era de altura, con Jorge Carrero, Diego López, «Fomor» y Pili además de un servidor, cada uno interpretando a su dragón con buen criterio y generosidad. El mío era un poco cabroncete, pero creo que le cogí el punto transcurrida una hora de partida más o menos. Hicimos doble sesión, mañana y tarde, con pausa para comer las excelentes pizzas de mi colega Paolo (aunque antes ya nos habíamos petado de frutos secos, queso y golosinas 😅). Vaya, que más allá de la partida, estupenda, con una preparación espectacular por parte de Emod, fue una quedada de amigos. Me alegré especialmente de tener en casa a Pili y a Diego, que se trasladaron desde Málaga para asisitir a la timba y a los que hacía mucho que no veía 😊
Pero bueno, hablemos de Dragones de cuera: Texas, aventura de «rol histórico» muy bien documentada y que algún día publicaremos en Walhalla Ediciones. Por lo que a mí respecta, llevaba mucho tiempo queriendo jugar este escenario por diversas razones, pero sobre todo porque es la introducción a un arco argumental bastante largo que Emod anda desarrollando y que llevará a los jugadores por los diferentes territorios del norte del virreinato de Nueva España a mediados del siglo XVIII. En aquel tiempo los dragones de cuera (o «soldados presidiales») se encargaban de defender la frontera sur y oeste de los actuales Estados Unidos, y su vida no era fácil... ni cómoda. Ya os podéis imaginar: a las carencias y el aislamiento de la vida cotidiana había que sumar la amenaza constante de apaches y comanches, abrumadoramente superiores en número, siempre dispuestos a saquear e incendiar granjas, aldeas de colonización y hasta los propios presidios.
Como podemos leer en Wikipedia, «los dragones de cuera diferían del ejército regular español por su contratación y
equipamiento. La mayoría eran nacidos en América, normalmente criollos o mestizos. Iban, por supuesto, a caballo, y cargaban con un armamento más potente.
Mientras un soldado regular español tenía fusil o pica y la espada, los
dragones de cuera estaban equipados también con lanza y escudo. Además, en lugar
de espada ropera o espadín, llevaban la llamada "espada ancha", espada típica de la América Española,
más corta y apta para punta y corte. Cada dragón de cuera tenía seis
caballos a su disposición, un potro y una mula, mientras que un dragón
español normal solía tener solo dos». Este tema de los caballos en concreto ha sido brillantemente adaptado por Emod a nivel mecánico, creando lo que podríamos denominar «fichas de caballos» para Ysystem y obligando a los jugadores a conocer bien a sus monturas (ya que unas son más apropiadas que otras en función de la situación) y a cambiar de una a otra para evitar su agotamiento. Creo que este pequeño subsistema de caballos que Emod se ha sacado de la manga está genial, y hace que te metas en la ambientación quizás más que ningún otro. Habrá que maquetarlo como Dios manda cuando llegue el momento.
La trama de la aventura, relativamente sencilla, permite buenas dosis de interacción entre los PJ, cosa que agradezco mucho. También te mete de lleno en la vida de los presidios fronterizos y en el día a día de los dragones, cuya relación con civiles y religiosos no estaba exenta de problemas. Nosotros jugamos Dragones de cuera: Texas y nos quedamos con ganas de más. Todos los PJ sobrevivieron, aunque dos de ellos lo hicieron muy por los pelos. «Fomor» y yo sacábamos todas las tiradas, con festival de críticos por momentos, mientras que Jorge, fiel a su estilo, las fallaba todas, y Diego y Pili las pasaban algo canutas. Me encantó el ambiente general «de frontera» que se respiraba en todas las escenas, y esa mezcla tan atractiva y peculiar de tonos: western, viejas glorias imperiales, exploración, colonialismo, espacios abiertos... Estuvo muy muy bien. ¡Muchas gracias a Emod por venir a dirigirnos!
Os dejo un par de fotillos y... ¡nos leemos!
De izquierda a derecha y en el sentido de las agujas del reloj: Pili, «Fomor», «Emod», Jorge y Diego. |
Primer combate de los dragones... saldado con una rotunda victoria 😎 |
Qué maravilla. Y Ernesto es un crack.
ResponderEliminarEstoy deseando hacerme con ese pedazo de módulo en cuanto se publique.
Hombre, muchas gracias. Ojalá sea prontito.
EliminarDesde que empecé a leer que iba a haber un módulo sobre los duros dragones estaba esperando alguna noticia más... Me dejas con los dientes largos Ignacio, ¿vais a editarla? La NECESITO.
ResponderEliminarSiiiii, por supuesto, la vamos a editar, aunque a nuestro ritmo, que es bastante lento. ¡Gracias por el interés!
EliminarContad con mi espada ancha, digooooo, mis reales!
EliminarMe lo pasé muy bien, vaya nuevos dragones que se juntaron aquel día!
ResponderEliminarEl mérito del subsistema de caballos es del gran Antonio Lozano, que, además de un crack y amigo, es un revisor que te cagas, siempre aporta mejoras increíbles.
Ahora ya a trabajar duro en la siguiente aventura, Dragones de cuera: Nuevo México.
¡A por ella!
EliminarDeseando poder verlas y jugarlas... ¿Tu idea es hacer cuatro aventuras? Por aquello de que fuese una por cada zona controlada por Nueva España...
EliminarEy, pues no andas desencaminado. Son cuatro aventuras en distintas regiones que conforman una campaña episódica, aunque es probable que la última de las cuatro sean dos aventuras conexas o una mini campaña. Cuando le dé forma veremos.
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